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Soy extremadamente valiente; mi valor lo he demostrado con mis acciones. Las grandes victorias que he tenido a lo largo de mi vida, no han sido una casualidad. Todas mis victorias han sido producto de mi esfuerzo, valor e inteligencia. Por eso , es que en este momento estoy tan contento; porque por fin voy a poder demostrarles a los duques hasta donde soy capaz de llegar. Quiero demostrarle no solo a ellos, al mundo entero, de que soy un caballero inigualable y que mi valentía no todos la tienen. De hecho, se puede decir que son pocos los afortunados de tenerla.

Sigo disgustado con Sancho por lo que hizo (abdicar a su puesto)pero por otro lado, me alegra que nuevamente se encuentre a mi lado, vamos a pasar nuevas aventuras juntos y le difundiré mas de mis conocimientos.

Mi amigo Sancho se cayo a un gran agujero junto con su asno y los tuve que sacar de allí. Quien sabe que habría sido de Sancho si yo no hubiera pasado de casualidad por ahí y no hubiera oído los altos lamentos y gritos de auxilio de Sancho.
Sancho es tuvo tanta suerte al haberme conocido. Yo le soluciono prácticamente todos sus problemas.

Después de haberle salvado la vida a Sancho; el me contó que los Duques le prometieron una ínsula menos conflictiva y me dijo que mientras eso pasaba; el iba a estar a mi lado en busca de aventuras, como es costumbre.

Es increíble como las personas no pueden ver las cosas con claridad. Los encantamientos los hacen ver las cosas de una manera incorrecta. No hace ver las cosas como en realidad pasan. El hombre con quien combatí era el labrador, lo que pasa es que todo mundo lo veía con otra cara. Lo bueno es que yo ya no caigo en esos encantamientos y si puedo ver las cosas como realmente pasan.
Me siento tonto por haber defendido el honor de la hija de la dueña del labrador porque después de todo ella se va a casar con el. Ella piensa que se casara con otro hombre. Pero ese hombre del que se cree haber "enamorado" es el mismo labrador.
Ella esta por cometer el peor error de su vida.

Pedí permiso a los duques para marcharme de allí. Las aventuras que en ese lugar debían ocurrir ya pasaron y me aguardan nuevas.

Pobre Altisidora, se me partió el corazón al oír el romance que me dedico. Me dijo lo enamorada que se encontraba de mi y que yo había sido malo con ella al no haberle mostrado ni un poco de cariño. Lo que ella no puede entender es que mi corazón es solo de una persona y esa persona no es ella. Ella me hace sentir mal porque, yo, como caballero no quiero aparentar ser una mala persona pero con las personas testarudas como ella no hay otra forma de hacerlas entender las cosas; mas que hablándoles con la cruda verdad.