miércoles, 1 de junio de 2011

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Que tristeza me da, enterarme que la madre de Antonomasia no respete lo que ella quiere. Antonomasia se enamoro de un hombre, el amor de su vida lo encontro. Yo estaba muy feliz por ella pero cuando me entere de que su madre no lo estaba, por el simple hecho de que el es de una clase inferior a la de ella. Su madre debio de estar agradecida con Dios porque su hija encontro a la persona con quien quiere compartir el resto de su vida. En cambio , su madre solo sintio egoismo, coraje y rabia. Egoismo porque ella penso que el caballero solo se acerco a su hija por la posicion social que el adquiriria si se casaba con ella. Coraje porque ella solo se entero de que se encontraban casados cuando ya lo estaban. Y por supuesto rabia porque ella hubiese deseado haber podido escogerle el mejor partido que ella hubiese considerado apropiado para ella.

Lo que ella no entiende es que la que tiene que pasar tiempo con la persona que se case es su hija no ella. Creo que ella murio y nunca se dio cuenta de eso. Que triste por ella. Seguramente su madre le escogio el marido a ella, un esposo por conveniencia, y ella queria hacer lo mismo con su hija.

Fue tanta la rabia, la colera que su madre tenia por esa situacion. El desprecio que le tenia al esposo de Antonomasia que prefirio morir, a tener que soportar vivir con eso. Vivir con la desgracia de que su hija se habia casado a escondidas con un plebello. Eso seria un gran desprestigio para su familia y simplemente ella no pudo vivir asi.

Tras la muerte , la perdida de la reina, aparecio un gigante, llamado Malambruno. El era primo hermano de la madre de Antonomasia. El vino con sed de venganza y fue precisamente eso lo que consiguio hacer. Convirtio a Antonomasia y a su esposo en estatuas de metal. Tambien hizo crecer barbas a todas las doncellas del Palacio para asi vengarse de Trifaldi; ya que ella habia ayudado a que la muerte de su prima se efectuara. Ella fue la que ayudo a Antonomasia a que consiguiera el amor de don Clavijo. Sin ella, su casamiento hubiese sido inalcanzable. Su romance hubiese sido una ilusion y su amor no hubiese existido.

Crei no ser capaz de decir que una mujer fuese fea. Pero admitir que esas doncellas que vi con barba no lucian en su mayor esplendor. Se veian ridiculas. Me hubiese gustado ser capaz de tener el poder de revertir ese hechizo.

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